LA NOVIA MÁS FEROZ
miércoles, 20 enero 2016
La crítica ha hablado. Le ha dado el ‘sí, quiero’ a La novia. La segunda película de la aragonesa Paula Ortiz se alzó anoche como la ganadora en los premios Feroz, entregados por la Asociación de Informadores Cinematográficos de España. Se hizo con 6 de los nueve galardones a los que optaba, entre ellos, mejor película dramática, mejor dirección, mejor actriz, para Inma Cuesta, y mejor actriz de reparto, para Luisa Gavasa. Las otras favoritas, Truman, de Cesc Gay, se tuvo que conformar con dos reconocimientos, y El desconocido se fue de vacío. Nuestra alegría como Festival al ver como dos de nuestros premios ‘Villa de La Almunia’ -Ortiz y Gavasa- recogían tales premios no pudo ser mayor.
Luisa Gavasa abrió camino. Con su inseparable elegancia, fue la primera en subir al escenario gracias a la intensidad y potencia de su personaje de Madre en el filme basado en Bodas de sangre. Su hijo en la ficción, Asier Etxeandia, le entrego el Feroz. Inma Cuesta se impuso a, entre otras, Penélope Cruz, nominada por Ma ma, y en su discurso tuvo un especial recuerdo para su padre en la película, Carlos Álvarez-Novoa, que falleció el pasado septiembre.
Paula Ortiz también recordó al actor, al que calificó de maestro. La realizadora agradeció el premio a la mejor dirección a todos aquellos que apoyan proyectos que, como La novia, buscan «nuevos horizontes» y que han creído que era necesario «dar voz y resonancia» a Federico García Lorca. Haciendo referencia a los versos del poeta y quitándose importancia, Ortiz aseguró que el galardón no era suyo, sino que era «culpa de la tierra». El productor, Álex Lafuente, al recoger el Feroz a la mejor película dramática, le recordó que su cine -el de Paula- era «absolutamente necesario porque la belleza hace falta en el cine». El largometraje de la aragonesa también ganó los premios a la mejor música original, por Shigeru Umebayashi; y mejor tráiler, por Roberto Bra.
En el apartado de interpretación masculina, el de mejor actor protagonista fue para Ricardo Darín, por su papel en Truman. Lo recogió su compañero de reparto, Javier Cámara, quien, perfectamente, también se lo podía haber llevado, pues el tándem que hacen es exquisito. Mario Casas recibió el de actor de reparto por Mi gran noche.
Completan el palmarés de los Feroz: Negociador, de Borja Cobeaga, como mejor comedia; Cesc Gay y Tomás Aragay, mejor guión por Truman; y mejor cartel, Natalia Montes por Requisitos para ser una persona normal. El Premio Feroz Especial fue para B, la película. Y una emocionada Rosa María Sardá recibía el Feroz de Honor de manos de su hermano Xavier. El público se puso en pie, pero enseguida les mandó sentar con su característico humor: «Sentarse, sentarse,… que no veo el momento de irme a fumar un cigarrillo». La homenajeada afirmó que era gustoso recibir un premio así porque hace feliz a todo el mundo, sobre todo a los que no lo reciben «porque eso quiere decir que aún les quedan años». Siempre se bromea con que este tipo de reconocimientos parecen poner fin a la carrera de quien los recibe, por eso ella aseguró que «no es cuestión de talento, sino cuestión de sobrevivir». La actriz también fue reivindicativa: «es muy emocionante ver que en la ferocidad que envuelve al mundo todavía sepamos hacer fiestas y cine, pese a los palos en las ruedas».
Y así, con ese 6/9, finalizó la tercera edición de los Feroz, en la que se celebró el éxito de una cuidada y preciosista boda trágica. Unos premios, que si es cierto que pueden considerarse como la antesala de los Goya -como lo son los Globos de Oro respecto a los Oscar en Hollywood, salvando las distancias-, dejan las quinielas bastante lorquianas. De momento, La novia tiene 12 cabezones pretendiente para el próximo 6 de febrero.